Lectura, crítica, análisis de novelas o textos

La lectura se aprende; máxime si a esta lectura le añadimos el adjetivo de crítica.

Uno puede tener aptitudes personales para la lectura, para el dibujo, para la danza, para el deporte...Ahora bien, las más altas cotas de comprensión, de pintura, de ritmo del cuerpo y de metas conquistadas no se consiguen sólo con las aptitudes, sino, partiendo de las aptitudes, gracias al entrenamiento. Todo entrenamiento tiene sus técnicas; conservando elementos comunes, pueden ser muy variadas...

En el acto de la lectura, el objetivo es la comprensión máxima del texto. Los diferentes campos teóricos y metodológicos han nacido de la focalización de ciertas obras y de determinados elementos presentes de manera general en todas las obras, que justifican y asientan mejor que otros los presupuestos ideológicos de los que parte. Esta focalización es buena y aprovechable; el peligro nace cuando la estrechez crítica o el dogmatismo ideológico convierten en mirada única esta focalización, pretendiendo explicar todos los elementos de una obra -o todas las obras- desde esa única mirada, elevada a la categoría de absoluto crítico.

No se leen diferentes tipos de novelas con una mirada idéntica; el lector tiene intereses y perspectivas diferentes según el objetivo perseguido por el texto; frente a cada novela, el lector focaliza el artefecto que tiene ante los ojos sensibles de su inteligencia de una manera determinada y esta focalización irradia sobre la totalidad de su lectura.

No es, pues, una determinada perspectiva crítica la que nos va a llevar a elegir un determinado enfoque metodológico de nuestra lectura; es la peculiaridad de la novela que analizamos la que nos obliga a elegir ese enfoque y a condensar en él todos los elementos críticos que la favorecen, con vistas al diálogo que vamos a mantener en nuestro acto de lectura. 

Teoría de la Literatura y Literatura Comparada

Análisis e interpretación de la novela 

 Javier del Prado de Biezma